6 mayo 2015
por clAra Membrilla. clara.membrilla@gmail.com
Tópicos: . Mujeres zapatistas: conquista, acasillamiento, 1994, nuevas generaciones. Mujeres de Kurdistán: poderes masculinos. modernidad democrática. Mujeres migrantes. Crisis estructural sistémica. Democracia-Verdad-Justicia. Eco socialismo radical. Resistencia, Rebeldía y Lucha Armada.
Mencionados: José Martí. Abdhulla Öclan. Bolívar Echeverría.
En esta jornada Seminario en la mesa de la tarde se contó con la destacada presencia de mujeres de distintas procedencias y edades: Tres generaciones de mujeres zapatistas y tres generaciones de mujeres de la sociedad civil desde diferentes trayectorias, posicionamientos y realidades.
La presencia distinguida de Havin Güneser, luchadora de la resistencia del Pueblo Kurdo trajo el saludo y el mensaje de su pueblo en rebeldía: “Al fin se han encontrado físicamente las luchas” dijo y entregó una bandera del pueblo kurdo a los familiares del Maestro Galeano “porque la lucha por la libertad es la misma”. En efecto, el pueblo kurdo se identifica como pueblo indio en su territorio en la Mesopotamia en Medio Oriente, como pueblo sin estado y en resistencia, está formulada su lucha como anticapitalista y comunalista; enarbolando los lemas de autogobierno, democracia y libertad.
Su intervención traducida en simultaneo del ingles, presentó fotografías y mapas de la vida de aquellas tierras de montañas y fuego, en las que se veían cientos de mujeres en trajes de guerrilla, en grupos, vigilantes, serias y sonrientes. Explicó la evolución ideológica a través de la historia del PKK (Partido de los Trabajadores Kurdos) y de su dirigente Abdullah Öcalan. Si bien este partido tiene su origen más remoto en el calor de los debates de fines de los ’60, “la resistencia es parte de nuestra forma de vida y la geografía está hecha para ella” dijo ya que este pueblo entre 1800 y 1948 protagonizó 28 rebeliones en contra del modelo patriarcal, el colonialismo, el nacionalismo; sufrió un proceso genocida y asimilatorio producto de la opresión de los estados vecinos de Siria, Irán, Irak y Turquía, y su misma existencia como pueblo ha sido sistemáticamente negada. En su formulación ideológica-política el PKK considera que el capitalismo desarrollado en los últimos 400 años es prolongación de la vieja sociedad patriarcal de cinco mil años de antigüedad, es decir que es resultado una combinación de todas las viejas sociedades de explotación; y en ese marco comprenden la masculinidad como un poder instituido al calor del estado, la guerra, los feminicidios y la explotación. A través de su historia el PKK ha interpretado que las mujeres fueron las primeras esclavizadas y por el trabajo social esclavo de las mujeres se han echado las bases de todas las sociedades esclavas, enseñando y perpetuando la esclavitud, es decir: la esclavización de las mujeres es la base de las demás esclavizaciones de la sociedad. “Por su propia furia contra las estructuras feudales y tribales” fue que las mujeres entraron en las milicias, explico, y con el tiempo construyeron su espacio de organización única y exclusiva dentro del PKK, como autodefensas y milicias de mujeres, contribuyendo tanto a su autoconfianza como a la construcción política e ideológica.
Desde esta organización proponen el concepto de modernidad democrática: una sociedad moral y política, de industrialización ecológica y confederalismo democrático. En este principio organizativo cada grupo es una unidad con expresión política autónoma con derecho a sus propias decisiones. Plantean la vindicación de las historias y las ciencias negadas así como la vuelta del intelectualismo como patrimonio de todo el pueblo. Sostienen que no es una forma alternativa de estado sino una alternativa al estado mismo.
La mesa estuvo integrada asimismo por la estudiante Mariana Favela del movimiento Masde#131, y las intelectuales Margara Millán vinculada a la Red de Feminismos Descoloniales, Sylvia Marcos y Silvia Federici (con un escrito).
Pero para hablar de la situación y problemática de las mujeres zapatistas escuchamos las voces de las tres generaciones de mujeres zapatistas. Tras la capucha de la Comandanta Miriam se veían las arrugas y la profundidad de sus ojos experimentados, y con detalle y sentimiento relató cómo era la situación de la mujer desde los tiempos de la conquista hasta 1994. Luego del despojo primigenio de la tierra los relatos sobre la esclavitud y los abusos sistemáticos por parte de los patrones de las haciendas en tiempos del acasillamiento: los inhumanas jornadas de trabajos para el hacendado en el café y moliendo sal, haciendo tortillas o acarreo de agua, el maltrato de lxs niñxs, las muchachas tomadas como amantes y objeto pariendo hijos sin padre. Cuando fueron abandonando las haciendas para formar las comunidades en las sierras, pudieron ya tener su propia casa y parcela. Pero las mujeres recibían otra vez la carga más pesada, y “los hombres aplicaron dentro de la casa, eran el patroncito de la casa, como el patrón actuaban (…) Y trajeron mala costumbre de los patrones” Decía que eran dadas en matrimonio por los padres sin su consentimiento porque “la mujer solo sirve para la cocina, para hijos, y los hombres no abrazan a los hijos, no apoyan y no les importa, luego si le dan el hijo y luego no le importa su crianza. Y a las tres o cuatro se levanta la mujer y hace el trabajo del pozol y el café y el desayuno. Y cuando vuelve el hombre del trabajo quiere agua caliente para su baño y sale a pasear. Y no importa si estas enferma, como te sientes, no pregunta. Cuando sale la mujer va tapada su cabeza, con la cabeza agachada. Y solo los hombres pueden ser autoridades, estar en la calle, participar. No había escuela, y cuando hubo no nos dejaron. Y no podíamos reclamar por los golpes y los insultos, el mal gobierno da razón a los hombres y quedamos humilladas y avergonzadas por ser mujer. No había atención de salud porque no hablábamos castilla y así mueren niños y mujeres”
Un silencio sin mácula reinó en la sala llena de gente, las palabras de la comandanta atrapaban con la fuerza de la justicia y la verdad. Latinoamérica del color de la tierra pasaba completa no solo por sus palabras sino en sus ojos: la mirada firme pareció hablar por los ojos de tantas mujeres y niñas atropelladas por los privilegios animales del poder masculino. Cientos de imágenes de dolores se atragantaron en el pecho de la concurrencia, que en vez de llanto estalló en un aplauso cerrado y de pie como homenaje a la Comandanta y a todas las demás mujeres, estas sí, mártires de la tragedia de nuestra historia, un aplauso para llenar de coraje la vergüenza, la terrible verdad de la opresión que continua, coraje para no flaquear de lo tanto que falta. Fue sin duda un aplauso de alegría y esperanza: mientras lee en castilla frente a la multitud, imaginar miles de sonrisas libres, como tal vez la de ella tras el pasamontaña de rebelde que la oculta y la libera.
La segunda voz fue de la Comandanta Rosalinda: “no sabíamos de nuestro derecho de organizarnos, de participar, de hacer otros trabajos, nadie nos explicaba. Hasta que las compañeras empezaron reclutarnos y a necesitar reclutar responsables. Las compañeras hicieron trabajos porque entendieron de la explotación del mal sistema. Entendimos que tenemos valor y fuerza igual que los hombres, no tuvimos miedo frente al enemigo. Y estamos dispuestas a una revolución de hombres y mujeres”
La Comandante Dalia contó que ” ahora cuando las compañeras tienen miedo de hablar entonces salen platicas, y entre nosotras nos tenemos mucha paciencia. Algunos se ponen cabroncitos de los hombres pero la mayoría entendieron, y ya no se dejan las compañeras. Ya se quejan las compañeras con las autoridades del gobierno autónomo, según acuerdo en cada pueblo. Aprendemos a escribir un poco, a leer un poco, a hablar castilla. No paramos mas de organizarnos contra el sistema, hombres y mujeres luchando al cien por ciento”
Lizbeth, compañera base de apoyo, dijo, como si tal cosa: “Las jóvenas no conocimos capataz, patrón, terrateniente, ni sabemos llegar con los presidentes municipales oficiales. Aun nos da pena participar o hablar pero hacemos trabajo en salud, educación, laboratorio, odontología, enfermería, partería, hueseras y plantas medicinales.” Y la compañera escucha Selena aportó su análisis: “la guerra de baja intensidad es en contra de los jóvenes, con ideas como los celulares, ropa, zapatos, ideas a través de la televisión, novelas, partidos de futbol, comerciales, para distraerse y no organizarse en la lucha. Sí compramos zapatos, modestos como los que usan los pobres, y ropas modestas, los celulares los usamos como zapatistas, la televisión para las noticias, no para distraernos. Y trabajamos la Madre Tierra. Los que no son zapatistas han caído en la propaganda del mal gobierno. Abandonaron sus familias por poco, por estar de moda. Y además son pobres pobres. Decimos pobres pobres porque son pobres como nosotros, y además son pobres de pensamiento. Vuelven y no quieren trabajar, tienen malas ideas. Los zapatistas somos ricos de pensar, y los trabajos son para bien del pueblo que es lo que queremos”
Al terminar, el Sup. Galeano que coordino la mesa leyó un escrito sobre las compañeras zapatistas no indígenas y los argumentos del debate género, y además otro escrito del GatoPerro.
Silvia Marcos abordo la temática de género a través del dialogo entre los conceptos de la ciencias sociales y de las zapatistas. Rescató así el “caminar parejo”, expresión tomada de una comunidad zapatista tojolabal que alude a la forma en la que debe ser la relación entre hombres y mujeres. Centró su análisis en aquellas practicas reales que han conquistado las mujeres zapatistas en el ejercicio del poder dentro del gobierno autónomo, en el que son parte de un proceso creativo activo y social. Identifica que se presenta a la vez un “igualitarismo y una idea de la diferencia de una forma combinada y simultanea única en su tipo” resumida en el “somos iguales porque somos diferentes” según sus palabras, estas ideas-practicas de las comunidades hablan de las relaciones entre hombres y mujeres pero no solo de eso: la misma idea del colectivo parte de la dinámica de personas encastradas, a la vez opuestas y complementarias, unidas y a veces desunidas.
Carla Quiñones participo a través de un video en el que planteó la situación de las mujeres migrantes en Nueva York, mayormente provenientes de zonas rurales, y que sufren desde sus pueblos la opresión capitalista en forma de negación de la educación y que en la situación de migracion deriva en consiguiente marginación y temor de la vida en sociedad. La opresion es agravada en la ciudad destino en la que son mano de obra no calificada y constituyen un grupo altamente explotado: en las estadísticas la población migrante mexicana es la más pobre de los Estados Unidos. Como consecuencia, la vida social de estas mujeres está paralizada, situación derivada y sostenida por las diversas formas de opresion machista trasladadas desde el lugar de origen. En este sentido la construcción de espacios comunitarios en plazas públicas, la alfabetización y promoción de cooperativas de trabajo para la empoderamiento de las mujeres es parte de un proyecto en dialogo con la idea de autonomía y gestión eficaz de los propios asuntos.
Las Crisis y el combate a la Hidra
En la jornada de la mañana se contó con la presentación escrita de los trabajos de tres reconocidos sociólogos. El estadounidense Immanuel Wallerstein y el mexicano Pablo González Casanova abordaron aspectos de la crisis actual, y desde Brasil Michael Lowy resumió la propuesta del Eco Socialismo como alternativa radical.
De la presentación del primero se puede destacar su análisis coincidente con el diagnostico sostenido en este Seminario de la crisis estructural del sistema capitalista. Si bien esta ha sido antecedida de recesos cíclicos, el autor sostiene que una crisis estructural como la presente no tiene retorno: el sistema no puede volver al equilibrio y se abre la pregunta de qué camino seguirá el nuevo sistema histórico. Es desafío de los movimientos anti sistémicos desarrollar estrategias útiles para los próximos 20 a 40 años de crisis que se avecinan. Las opciones de reacción de la minoría dominante podrán ser la represión o la estrategia de ‘cambiar todo para que nada cambie’ con alternativas aparentemente atractivas pero de fondo ilusorio, disfrazadas de propuestas progresistas y radicales. Las recomendaciones de este analista ante este desafío: en un análisis de las fallas de las estrategias de la izquierda en la historia, apostar por un balance desde la heterogeneidad y descentralidad para elecciones políticas reales; desmercantilizar las relaciones de producción; lucidez para discernir los cambios de disfraz y de slogans tras los cuales los privilegiados y poderosos se esconden para su perpetuación. Es menester tener en cuenta que es esta una oportunidad histórica para la acción creativa, porque es en el ambiente caótico de la crisis sistémica que las pequeñas acciones pueden tener grandes consecuencias.
El profesor González Casanova se extendió sobre las definiciones de democracia, verdad y justicia. En la redefinición y materialización del mundo que queremos propone una construcción democratica basada en un núcleo de organización de organizaciones, una libertad moral y política y una justicia que incluya el cese de la producción de bienes de lujo y de basura así como el respeto por las manifestaciones culturales diversas e históricas. Denuncia asimismo la existencia de una guerra mundial no convencional hecha de muchas guerras ( como las de cariz religioso, el mismo narcotráfico) que distraen el principal objetivo que es la guerra capitalista por la recolonización del mundo y que genera enormes dividendos para las grandes industrias de armamentos, la banca, la ayuda humanitaria…
Michael Löwy acentuó en la cabeza de la hidra que corresponde al cambio climático y la catástrofe ecológica de raíz sistémica; y desarrollo la propuesta del eco socialismo como alternativa radical basada en la reflexión de doble origen ecológico y socialista marxista. Denuncia el productivismo de mercancías del sistema capitalista y propugna la disminución de la jornada laboral, así como una revolución que transforme la estructura completa del aparato productivo y no solo las relaciones de producción y propiedad.
El Subcomandante Insurgente Moisés para cerrar las exposiciones de la mañana hablo con estas palabras sobre la resistencia y la rebeldía. Dijo que la Resistencia es fortalecerse y Rebelde es ser bravos para hacer las acciones según convenga, y organizar la resistencia, la rebeldía es saber controlarla y saber usarlas como herramientas de lucha. “Queremos recordarles que nosotros somos armados” y son las armas una herramienta más como un pico, un machete o un palo. En el camino son los compañeros y compañeras bases de apoyo quienes han puesto en la balanza la lucha política pacifica o la lucha militar, aprendiendo también de experiencias como la de Guatemala. Gracias a la resistencia tenemos la vida y por ello dejamos de matarnos entre nosotros por la manipulación que hace el gobierno. La defensa de la vida es no solo propia del zapatismo, sino que fue el reclamo de la sociedad civil mexicana cuando marchara en enero de 1994 pidiendo el cese de las muertes y el enfrentamiento armado. Desde entonces se opta por resistir las burlas y provocaciones, y no se renuncia a las armas: cada vez es el pueblo el que manda a los milicianos como actuar o no actuar. La consigna de ” queremos que esto dure siglos y por los siglos, parece religioso pero no, es de rebeldes para que ya no vuelvan los hijos de los finqueros”.
[Audio] Comandanta Miriam
“la mujer solo sirve para la cocina, para hijos, y los hombres no abrazan a los hijos, no apoyan y no les importa, luego si le dan el hijo y luego no le importa su crianza. Y a las tres o cuatro se levanta la mujer y hace el trabajo del pozol y el café y el desayuno. Y cuando vuelve el hombre del trabajo quiere agua caliente para su baño y sale a pasear. Y no importa si estas enferma, como te sientes, no pregunta. Cuando sale la mujer va tapada su cabeza, con la cabeza agachada. Y solo los hombres pueden ser autoridades, estar en la calle, participar. No había escuela, y cuando hubo no nos dejaron. Y no podíamos reclamar por los golpes y los insultos, el mal gobierno da razón a los hombres y quedamos humilladas y avergonzadas por ser mujer. No había atención de salud porque no hablábamos castilla y así mueren niños y mujeres”