Y está bien: NOSOTROS NO PODEMOS NEGARLES ESE DERECHO, NI OFENDERNOS NI PONERNOS A REMEDIAR DE UN DÍA PARA OTRO LA COSTUMBRE DEL CHISME, LOS PREJUICIOS Y LOS CUENTOS. Cada quien debe creer en lo que mejor le parezca o mejor le convenga.
Solo quisiéramos dejar claras dos o tres cosas.
1) Los padres de familia y sobrevivientes, al igual que miles en el país y en el mundo, somos víctimas de violaciones graves a los Derechos Humanos.
2) Tanto padres de familia y sobrevivientes, al igual que los miles de México y el mundo, enfrentamos este problema sin los recursos ni la ayuda necesaria de las instituciones estatales.
3) Hemos resistido tanto solo por la ayuda de miles y miles de mexicanos y seres de todo el planeta, gracias a aquellos y aquellas que se identifican con nosotros y que saben que no nos estamos inventando un problema como este.
De aquellos y aquellas que comprenden que el problema está extendido por toda la tierra y que para resolverlo se necesita el concurso de todos y todas, por los medios legales y pacíficos sí, pero también defendiéndonos a la hora de la violencia institucionalizada.
4) padres y sobrevivientes hemos tenido que recurrir a otras instituciones, organismos y gobiernos debido a la decepcionante actuación de nuestro propio gobierno.
5) la lucha no ha sido solo en las calles ni contra el gobierno exclusivamente. Desde el principio identificamos que junto al problema de la desaparición forzada hay otros que la propician y la velan, que hay causas o raíces muy hondas en cada problema… Incluso dijimos públicamente que nosotros mismos somos parte del problema y que de igual forma debemos ser pare de la solución. Esto último hay quienes pasan sin notarlo.
6) hemos hecho de todo. Muchos cuestionan el método y las formas. Estas personas, líderes de opinión casi siempre, resultan ser mejores que nosotros. El problema es que no sugieren, solo juzgan y de manera malévola, con toda la intención de restarnos credibilidad.
Pues a estos últimos les decimos que “les guste o no”, aquí estamos, aquí seguimos resistiendo, pues son ellos y a quienes ellos defienden quienes nos han orillado a esto: A LUCHAR, A RESISTIR, A BUSCAR.
¡¡PORQUE VIVOS SE LOS LLEVARON!!
¡¡VIVOS LOS QUEREMOS!!